REFUTACIÓN A LA DOCTRINA DE LOS FALSOS MAESTROS SABATARIOS

Los cristianos bíblicos somos ministros de un Nuevo Pacto

Los cristianos bíblicos somos ministros de un Nuevo Pacto establecido en la sangre del Mesías para el perdón de los pecados:

«Y tomando la copa, y habiendo dado gracias, les dio, diciendo: Bebed de ella todos; 28 porque esto es MI SANGRE DEL NUEVO PACTO, QUE POR MUCHOS ES DERRAMADA PARA REMISIÓN DE LOS PECADOS.» (Mt.26:27-28).

El apóstol Pablo habló de estos verdaderos ministros competentes del Nuevo Pacto en la sangre del Mesías:

«el cual asimismo NOS HIZO MINISTROS COMPETENTES DE UN NUEVO PACTO, no de la letra, sino del espíritu; porque la letra mata, mas el espíritu vivifica.» (2Co.3:6).

Por lo tanto, los cristianos bíblicos no somos ministros de la Ley, es decir, de la letra del antiguo pacto de Dios en el Sinaí, sino servidores (ministros) de un NUEVO Pacto del espíritu, el cual da la vida.

Pablo dijo que el antiguo pacto, grabado en letras en las tablas de piedra del Decálogo, era un ministerio de muerte y condenación:

«Y si EL MINISTERIO DE MUERTE GRABADO CON LETRAS EN PIEDRAS fue con gloria, tanto que los hijos de Israel no pudieron fijar la vista en el rostro de Moisés a causa de la gloria de su rostro, la cual había de perecer, 8 ¿cómo no será más bien con gloria el ministerio del espíritu? 9 Porque si el MINISTERIO DE CONDENACIÓN fue con gloria, mucho más abundará en gloria el ministerio de justificación» (2Co.3:7-9).

Por lo tanto, los verdaderos cristianos JAMÁS pueden mezclar estos dos pactos, ya que son totalmente opuestos e irreconciliables: el primer pacto es de muerte y condenación, pero el Nuevo Pacto es de vida y justificación. Pretender basar la salvación o justificación en el cumplimiento de los mandamientos de Dios escritos en las tablas de piedra del Decálogo es una aberración, y solo aquellos falsos cristianos que desconocen el verdadero Evangelio de la Gracia de Dios son capaces de hacer semejante estropicio y perversión del Evangelio (Gal.1:6-8).

REFUTACIÓN DE LA DOCTRINA DE LOS FALSOS MAESTROS SABATARIOS

Desgraciadamente miles de falsos maestros que desconocen el verdadero Evangelio de la Gracia de Dios son ministros del antiguo pacto de la Ley, y por eso enseñan que tenemos que guardar los Diez Mandamientos para ser salvos. Por ejemplo, millones de falsos cristianos y de «judíos mesiánicos» enseñan que los discípulos del Mesías tenemos que observar el séptimo día de la semana, el sábado, y si no lo guardamos, entonces no podremos salvarnos, sino que -según ellos- recibimos la marca de la bestia, es decir, según esos falsos maestros sabatarios, ¡si usted no deja de trabajar los sábados, se condenará!. Esta aberración diabólica y anticristiana la enseñan, por ejemplo, millones de «adventistas del séptimo día» y otros muchos «cristianos», como la «Iglesia de Dios del Séptimo Día», y también muchos «judíos mesiánicos», ¡semejante doctrina de demonios es un rechazo frontal del verdadero Evangelio de la Gracia de Dios! (Hch.20:24). Un verdadero ministro del Nuevo Pacto jamás podrá enseñar semejante falsedad anticristiana, que no es más que una perversión del verdadero Evangelio de la Gracia de Dios (Gal.1:6-8, Hch.20:24).

Los falsos maestros sabatarios enseñan que los seres humanos guardaron el sábado antes de darse esa ley en el Sinaí. Incluso esos falsos maestros dicen que el sábado lo guardaban antes de Abraham. Esa afirmación es completamente falsa, es una burda mentira herética. Los seres humanos JAMÁS guardaron el sábado antes de la salida de Israel de Egipto y ratificada en la ley en el Sinaí, ya que esta ley del sábado fue dada SOLAMENTE A ISRAEL en el Sinaí. Antes de Dios dar esa ley, nadie la guardaba, porque NO SE PUEDE GUARDAR UNA LEY QUE DIOS AUN NO HA DADO AL SER HUMANO.

Gguardar los mandamientos de Dios no significa que tengamos que guardar el sábado, porque resulta que la Biblia dice que Abraham guardaba los mandamientos de IEVE , sus leyes y sus estatutos: “por cuanto oyó Abraham mi voz, y guardó mi precepto, mis mandamientos, mis estatutos y mis leyes.” (Gen.26:5). Ahora bien, resulta, que Abraham no guardaba el sábado, ya que esa ley del sábado solamente fue dada a Israel en el Sinaí, cientos de años después del nacimiento de Abraham, dicho en otras palabras, ¡Abraham nunca conoció ese mandamiento de guardar el sábado y por eso es que nunca lo guardó!, ¿o como se puede guardar un mandamiento que Dios aun no ha dado?

El Mesías guardaba los mandamientos de Dios, sin embargo, él quebrantaba el sábado, tal como dijo Juan (Jn.5:18). Y que no me vengan los sabatarios con esa idiotez de que ese pasaje de Juan se refiere a las «tradiciones rabínicas», ya que el texto de Juan dice bien claro «EL DIA DE REPOSO«, es decir, el sábado, no dice por ninguna parte «tradiciones rabínicas».

El Mesías NUNCA pecó, aunque quebrantara el sábado, ¿por qué?, por la sencilla razón de que QUIEN AMA AL PRÓJIMO YA HA CUMPLIDO LA LEY:

«No debáis a nadie nada, sino el amaros unos a otros; porque EL QUE AMA AL PRÓJIMO, HA CUMPLIDO LA LEY. Porque: No adulterarás, no matarás, no hurtarás, no dirás falso testimonio, no codiciarás, y cualquier otro mandamiento, en esta sentencia se resume: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. El amor no hace mal al prójimo; así que EL CUMPLIMIENTO DE LA LEY ES EL AMOR. “(Ro.13:8-10).

Cuando el Señor Jesús trabajaba en sábado (Jn.5:17), lo hacía por el beneficio de los seres humanos necesitados, es decir, por AMOR AL PRÓJIMO, por lo tanto, ¡él no estaba pecando!, sino que estaba cumpliendo la Ley, pues, repito, quien ama al prójimo ya ha cumplido la ley, aunque esté quebrantando el sábado.

Esa doctrina sabataria de que IEVE dio el sábado para que lo guardaran todos los seres humanos es una falsedad espantosa. Dios JAMÁS les dijo a Adán y Eva que guardaran el sábado, y tampoco se lo dijo a ninguno de los patriarcas antediluvianos, ni tampoco les dijo que guardaran el sábado a Abraham, Isaac y Jacob. El sábado fue un sello o señal que IEVE le dio solamente a la nación de ISRAEL en el Sinaí, ¡y a nadie más!:

“Seis días se trabajará, mas el día séptimo es día de reposo consagrado a IEVE, cualquiera que trabaje en el día de reposo, ciertamente morirá. Guardarán, pues, el día de reposo los hijos de Israel, celebrándolo por sus generaciones por pacto perpetuo. Señal es para siempre entre mí y los hijos de Israel; porque en seis días hizo IEVE los cielos y la tierra, y en el séptimo día cesó y reposó.” (Ex.31:15-17.

La Iglesia del Mesías no es Israel, por lo tanto, esa señal del pacto que Dios le dio a Israel no tiene que ver nada con los cristianos, es decir, con la Iglesia del Mesías. El sello de Dios con la Iglesia del Mesías no es el sábado, sino solamente el espíritu santo:

“En él también vosotros, habiendo oído la palabra de verdad, la Buena Noticia de vuestra salvación, y habiendo creído en ella, fuisteis sellados con el espíritu santo de la promesa” (Ef.1:13).

“Y no contristéis al espíritu santo de Dios, con el cual fuisteis sellados para el día de la redención.” (Ef.4:30).

Por lo tanto, esa doctrina sabataria de que el sábado es el sello de Dios con los cristianos es una burda mentira diabólica inventada para engañar a los cristianos.

En el libro de los Hechos no se dice por ninguna parte que los primeros cristianos guardaran el sábado. Pablo, siendo cristiano, JAMÁS GUARDÓ EL SÁBADO, él entraba en las SINAGOGAS DE LOS JUDIOS los sábados, pero no para guardar el sábado, sino para predicarles el Evangelio a los judíos, y discutir con ellos, para demostrarles con las Escrituras que Jesús es el Mesías.

Esas reuniones de judíos en sus sinagogas los sábados no eran reuniones de cultos cristianos, ya que esos judíos de ninguna manera creían en el Mesías Jesús. ¡Los cristianos jamás guardaban el sábado!

Pablo JAMÁS enseñó a los cristianos que tenían que guardar el sábado y que se tenían que reunir los sábados para hacer cultos especiales, al contrario, el libro de los Hechos lo que enseña de forma clara e irrefutable es que los cristianos de Jerusalén se reunían TODOS LOS DÍAS en el templo y en las casas para predicar y enseñar:

«Y todos los días, en el templo y por las casas, no cesaban de enseñar y predicar a Jesús, el Mesías.» (Hch.5:42).

Si los primeros cristianos hubieran sido unos sectarios sabatarios como vosotros, entonces ese texto diría que ellos se reunían los sábados como día especial de culto, pero resulta que el pasaje dice que se reunían TODOS los días de la semana para predicar el Evangelio y para enseñar doctrina.

Los falsos maestros sabatarios también citan Apocalipsis 1:10 para decir que los cristianos del siglo 1 guardaban el sábado. Ahora bien, ese pasaje no dice por ninguna parte que los cristianos guardaran el sábado, lo único que dice ese pasaje es que Juan recibió la Revelación o Apocalipsis en el día del Señor, nada mas no nada menos, pero por ninguna parte dice que los cristianos guardaran el sábado. Por ejemplo, si Juan hubiera recibido esa Revelación o Apocalipsis en el primer día de la semana, el domingo, ¿significaría eso que Juan estuviera guardando el domingo?, ¡de ninguna manera!, simplemente significa que fue ese día de la semana cuando recibió la Revelación del Mesías Jesús, como la podría haber recibido en cualquier otro día de la semana. Por lo tanto, Apocalipsis 1:10 lo que dice sencillamente es que fue en el día del Señor cuando Juan recibió esas visiones del Apocalipsis.

Veamos otro interesantísimo ejemplo bíblico de cómo se puede quebrantar el sábado y ser sin pecado, sin culpa: los sacerdotes hebreos que ministraban en el templo de Jerusalén también QUEBRANTABAN el sábado, y el Mesías dijo bien claro que ellos eran SIN CULPA, sin pecado: «¿O no habéis leído en la Ley, cómo en el día de reposo los sacerdotes en el templo QUEBRANTAN EL DÍA DE REPOSO, Y SON SIN CULPA?» (Mt.12.5). Por consiguiente, ¡ahí lo tenemos bien claro!, LOS CRISTIANOS BÍBLICOS PODEMOS PROFANAR O QUEBRANTAR EL SÁBADO, Y SOMOS SIN CULPA.

Los que hemos creído en Jesús ya hemos entrado en el sábado o REPOSO verdadero, por medio de la fe, del cual el sábado de la Ley de Moisés era un tipo:

» Pero los que hemos CREÍDO entramos en el REPOSO» (Heb.4.3).

Por lo tanto, los cristianos que estamos bajo el Nuevo Pacto en la sangre del Mesías PODEMOS QUEBRANTAR EL SÁBADO, trabajando ese día, o trabajando el domingo, porque el séptimo día de la semana, el sábado, era simplemente UN TIPO DEL VERDADERO REPOSO QUE EL MESÍAS NOS DARÍA AL CREER EN ÉL, y una vez que ya hemos creído en Jesús , el sábado cumplió su función.

Veamos otros pasajes bíblicos que los sabatarios esgrimen siempre para enseñar la mentira de que los cristianos tenemos que observar el sábado, so pena de perdernos eternamente si no lo observamos:

1.- Mateo 24:20. el Mesías dijo que sus discípulos que vivieran en Jerusalén y Judea tendrían que orar, para que su huida a las montañas no ocurriera ni en invierno, ni en sábado. Esta profecía del Mesías se cumplió en el año 70, cuando todos los cristianos que moraban en Jerusalén y Judea escaparon a las montañas cuando vieron a las legiones romanas rodear Jerusalén para destruirla (Lc.21:21-24).

En invierno la huida de los cristianos que vivieran en esas tierras sería muy dificultosa, a causa de las lluvias y el frío, y en sábado también sería muy dificultosa, ya que los fanáticos religiosos judíos les prohibirían y castigarían si ellos decidieran escapar en sábado, andando muchos kilómetros, es decir, ESE PASAJE DEL MESÍAS NO DICE POR NINGUNA PARTE QUE ESOS DISCÍPULOS DEL MESÍAS ESTARÍAN OBSERVANDO EL SÁBADO CUANDO LLEGARA EL MOMENTO DE ESCAPAR A LAS MONTAÑAS.

2.- Lucas 4:16, Jesús entraba en las sinagogas los sábados sencillamente para PREDICAR EL EVANGELIO DEL REINO A LOS JUDÍOS, y el sábado era el mejor día, ya que es el día que ellos utilizan para reunirse en sus sinagogas para estudiar las Escrituras, por eso es que el Mesías entraba en las sinagogas los sábados, para demostrarles con las Escrituras que el Mesías habría de padecer. Por lo tanto, ese pasaje no dice por ninguna parte que el Mesías guardara el sábado, al contrario, el Mesías DIJO QUE TRABAJABA EN SÁBADO (Jn.5:17), y por eso es que Juan dijo que el Mesías QUEBRANTABA EL SÁBADO (Jn.5:18),

3.- Hechos 13:13. Este pasaje, y otros más de Hechos, dicen que Pablo tenía por costumbre entrar en las sinagogas de los judíos los sábados, ¡pero NO PORQUE PABLO GUARDABA EL SÁBADO!, sino porque Pablo les PREDICABA EL EVANGELIO A LOS JUDÍOS PRIMERAMENTE, y después se lo predicaba a los gentiles, y el mejor día era los sábados, ya que es el día cuando los judíos se reúnen en las sinagogas para estudiar las Escrituras. El pasaje no dice por ninguna parte que Pablo guardara el sábado. Pero no solo esto, resulta que ese pasaje dice que se trataba de SINAGOGAS DE LOS JUDÍOS, ¡los cuales no creían en el Mesías Jesús !, es decir, NO ERAN IGLESIAS O REUNIONES CRISTIANAS FUNDADAS POR PABLO, lo cual demuestra de forma irrefutable que las iglesias fundadas por Pablo, y Pablo mismo, NO OBSERVABAN EL SÁBADO, ¡este era observado solamente por los JUDÍOS INCRÉDULOS en sus sinagogas!, nunca por los cristianos.

Los falsos maestros sabatistas, sean judíos o no, enseñan que los cristianos guardarán el sábado por la eternidad, y ellos basan esta doctrina en Isaías: 66:23. Vamos a analizar esa doctrina, y usted descubrirá el tremendo ENGAÑO de los sabatistas, y la enseñanza pura de la Palabra de Dios, especialmente de la Revelación de Jesús: el Apocalipsis.

El Mesías enseñó bien claro en su Revelación profética que sus seguidores, los cristianos bíblicos, VIVIRÁN EN LA NUEVA JERUSALÉN CELESTIAL. Veámoslo:

a) LA NUEVA JERUSALÉN CELESTIAL ES LA ESPOSA DEL MESÍAS, LA CUAL DESCENDERÁ DEL CIELO A LA NUEVA TIERRA (Ap.21:9-10), y resulta que esa esposa del Mesías es LA IGLESIA, compuesta por todos los santos (Ap.19:7-8). Por lo tanto, ¡en esa ciudad celestial que descenderá del cielo estará morando la Iglesia de Dios, es decir, los verdaderos cristianos glorificados y divinizados!

b) SOLAMENTE LOS QUE ESTÁN INSCRITOS EN EL LIBRO DE LA VIDA DEL CORDERO FORMAN PARTE DE LA NUEVA JERUSALÉN (Ap.21:27), pero resulta que son los cristianos verdaderos los que están inscritos en el libro de la vida del Mesías: Lc.10:20, ellos son la congregación de los primogénitos, inscritos en los cielos: Heb.12:22-23. Por lo tanto, la Nueva Jerusalén celestial no estará formada por los «judíos» que guardan el sábado, ¡¡sino por los verdaderos CRISTIANOS del Nuevo Pacto, YA SEAN DE ORIGEN JUDÍO O GENTIL!! ELLOS SON LA GRAN MUCHEDUMBRE DE REDIMIDOS QUE MORARÁN EN EL TABERNÁCULO O CASA DE DIOS, QUE ES LA NUEVA JERUSALÉN (Ap.7:9-14).

c) LA NUEVA JERUSALÉN NO SERÁ LA MORADA DE LAS NACIONES, ya que las naciones de la tierra serán gobernadas e iluminadas por esa Nueva Jerusalén celestial, y los reyes de la tierra llevarán a esa Nueva Jerusalén la honra y la gloria de las naciones (Ap.21:24-26). Por lo tanto, una cosa es la Nueva Jerusalén, en la cual morarán los cristianos glorificados y divinizados, y otra cosa son las naciones y sus reyes, que vivirán en la nueva tierra como seres humanos de carne y hueso, los cuales serán gobernados por los seres divinos de la Nueva Jerusalén.

d) Cuando ese pasaje de Isaías 66:23 dice, por tanto, que de mes en mes, y de sábado en sábado los seres humanos vendrán a adorar a IEVE , SE ESTÁ REFIRIENDO A LAS NACIONES DEL MUNDO, es decir, a los seres humanos de carne y hueso que vivirán en la nueva tierra, ya que los cristianos divinizados y glorificados que vivirán en la Nueva Jerusalén no necesitarán un día a la semana para adorar a IEVE , pues TODOS los días le adoraremos y serviremos (Ap.22:5), y no solo eso, en la Nueva Jerusalén celestial no existirá la noche, por lo tanto, ¡es IMPOSIBLE que los cristianos glorificados que vivan en esa ciudad celestial puedan guardar el sábado!, ya que el ciclo del día y de la noche no existirá en esa gloriosa ciudad celestial.

e) EL TEMPLO DE DIOS, DESCRITO POR EL PROFETA EZEQUIEL (Ez.40-48) NO ES LA NUEVA JERUSALÉN CELESTIAL, ya que ese templo de Dios descrito por Ezequiel no se parece en nada a la Nueva Jerusalén celestial descrita en Apocalipsis 21 y 22, son dos templos completamente diferentes. Ese templo literal en Jerusalén, mencionado por Ezequiel, es el que existirá durante el Milenio, sin embargo, la Nueva Jerusalén celestial estará en el CIELO durante el Milenio, y después del Milenio descenderá a la nueva tierra (Ap-21:1-3).

f) Los cristianos glorificados NO PODREMOS GUARDAR EL SÁBADO EN LA NUEVA JERUSALÉN CELESTIAL, ya que el ciclo del día y de la noche no existirá en esa ciudad celestial, pues la gloria de Dios la iluminará (Ap.21:23); por lo tanto, ¡es totalmente IMPOSIBLE que en esa ciudad gloriosa se pueda observar el sábado! Que esos falsos cristianos o mesiánicos que se creen tan justos por observar el sábado me expliquen como ellos podrían guardar el sábado SIN EL CICLO DEL DÍA Y DE LA NOCHE, por ejemplo: que ellos nos expliquen como podrían observar el sábado si vivieran en el Círculo Polar Ártico, o en el Antártico, donde durante 6 meses seguidos es de noche en un Polo, y en el otro Polo es de día durante otros 6 meses seguidos. O que día observan los habitantes que viven en países alejados de Sudamérica y con los cuales hay bastantes horas de diferencia

Este estudio es mucho mas extenso. Aquí se han reproducido solo 5 de las 39 paginas de este libro del  teólogo Tito Martínez y el documento completo, el cual vale la pena leerlo en su totalidad,  se encuentra archivado en: http://www.las21tesisdetito.com/t7.htm (click here)

Gabriel

Servidor de Jesus