por Jeff Green
Este artículo pretende abordar el meollo de la virología y la vacunación en sí mismas, y en qué se basa la vacunación: toda la virología y la ciencia de las vacunas se basan en una cosa: que los virus son agentes infecciosos que causan enfermedades. Sin esta teoría, las vacunas no serían «eficaces» ni «funcionarían» en la mente de la gente. Sin la teoría del virus, las vacunas se desmoronarían como un castillo de naipes. Mostraré la pseudociencia que hay detrás de las teorías que sostienen la virología, y los enormes problemas que plantea.
En primer lugar, los virus no son organismos vivos ni microbios vivos. No tienen sistema respiratorio, ni núcleo, ni sistema digestivo. Los virus no están vivos y no son contagiosos. El miedo que hay detrás del Coronavirus, por ejemplo, es totalmente injustificado. Olvide todo lo que cree saber sobre virus y bacterias. Le han mentido.
La ciencia de la virología se basa en el estudio de los virus, sin embargo, no existen imágenes reales de la actividad viral (a excepción de un corto recientemente publicado (2018) de un virus VIH que muestra sólo el 20% del proceso teórico del virus).
Dichas filmaciones son meras animaciones y modelos en 3D.
La Enciclopedia Científica afirma que los virus se han obtenido para experimentación mediante centrifugadoras extremadamente potentes que deben ser construidas especialmente. Los virus son tan pequeños que su tamaño medio es de 0,1 micras para un virus típico.
La observación de los virus es intrínsecamente defectuosa
Los virus se observan en cultivos celulares/entornos de placas de Petri:
Los cultivos celulares se realizan en condiciones controladas fuera de su entorno natural, en las que las células se mantienen vivas artificialmente mediante fluidos que son tóxicos y dañan la actividad celular. En un entorno tan estéril, las células no pueden utilizar toda la gama de sus métodos normales de limpieza como lo harían en el cuerpo humano.
Dichos procesos son:
- Fagocitosis (y todos sus procesos)
Bacterias
- Fúngica
- Parasitaria
- Virales (virus
En los procesos de fagocitosis, los restos celulares y los tejidos muertos y moribundos son absorbidos y desechados para su eliminación fuera del organismo. Las bacterias son las principales encargadas de este proceso, principalmente como carroñeras. En casos especiales se recurre a hongos y parásitos, y en este proceso pueden utilizarse pequeñas cantidades de virus para acompañar todos los demás procesos. Todos estos procesos están vivos, pero los virus no lo están.
En un entorno tan artificial en el que las células se mantienen vivas pero no sanas gracias a los sueros, las células degenerarán y sus conserjes virales se harán prominentes. Los virus no se multiplican por sí solos. Cuando se añaden a placas de Petri fértiles que mantienen la vida celular, no aparecen estructuras proteínicas víricas adicionales. Sólo cuando se añaden células se multiplican las estructuras de proteínas víricas. Sin embargo, esto se debe a que las placas de Petri no son el entorno adecuado o saludable para las células, por lo que se producen residuos víricos. Esto se debe a que las células deben fabricar virus para limpiarse en un entorno tan tóxico, ya que no tienen acceso a toda la gama de sus procesos de limpieza como ocurriría en el cuerpo. Mostraré por qué.
Nota: Los virus son necesarios para disolver el tejido muerto y moribundo cuando el tejido es tan tóxico que los microbios vivos no pueden alimentarse y eliminar esos tejidos, desechos y restos celulares sin morir envenenados.
¿Cuándo se volvería prominente la actividad viral?
Como se ha dicho, los virus pueden acompañar estos procesos en pequeñas cantidades. Sin embargo, los virus sólo se volverán prominentes cuando todos estos otros procesos hayan sido en gran parte eliminados debido a:
- Toxicidad medioambiental
- Contaminación
- Inundación química
- Mala calidad del aire
- Mala calidad del agua
- Mala calidad de los alimentos
- Deficiencias nutricionales
- Combinación o elección incorrecta de alimentos
- Tratamiento médico, como antibióticos y medicamentos
Cuando un cuerpo tiene un alto grado de toxicidad, las bacterias que se alimentan de esa materia y tejidos muertos tóxicos serán envenenadas hasta la muerte. Cuando el cuerpo se encuentra en tal punto de toxicidad sistémica, donde los niveles bacterianos y todos los microbios vivos en el cuerpo han disminuido o muerto debido a las razones anteriores, el cuerpo recurrirá a la ayuda de los virus para ayudar a limpiarse. Cuando el cuerpo no puede utilizar métodos más suaves, como un resfriado (generalmente bacteriano), utilizará la ayuda de disolventes de proteínas no vivas que se conocen como virus. Mostraré por qué ésta es la única respuesta lógica.
Los virus ayudan a consumir y eliminar sustancias en pequeñas partículas que luego pueden ser expulsadas a través de las membranas mucosas, a través de la piel o a través del tracto intestinal. Las células producen virus cuando sus tejidos son tan tóxicos que los fagocitos, parásitos, bacterias y hongos no pueden ayudar a limpiar, reparar y regenerar sus tejidos y fluidos. La ciencia afirma, erróneamente y sin pruebas, que los virus se originan fuera del cuerpo, luego «secuestran» el ARN o el ADN de la célula y después se replican mientras atacan indiscriminadamente a las células. Si esto fuera cierto, los virus se replicarían sin cesar, atacando finalmente a todas las células sanas, pero no es así. Sabemos que los anticuerpos, un tipo de glóbulos blancos, regulan el virus. No existen pruebas en vídeo de que los virus secuestren células, salvo renders en 3D y animaciones basadas en la teoría.
La verdadera creación de los virus (visión simplista):
Pasos para la creación de un virus:
- Las proteínas virales forman parte del genoma del organismo vivo que existe en cada célula y que determina qué tipo de proteínas creará una célula.
- Las proteínas virales existentes en la célula entran en el núcleo de la misma. Los virus se fabrican en su forma completa dentro de la célula y se codifican a través de las directivas del huésped ARN/ADN.
- El virus abandona el núcleo y se aloja en la célula hasta que sale de ella.
- El virus es expulsado por la célula, dañando una parte de ésta, pero sin destruirla.
- Los virus cambian cada 72 horas. La replicación del virus continúa y cada 72 horas se agota la primera cepa, y entonces un conjunto completamente nuevo de virus es fabricado por las células para continuar el trabajo del anterior hasta completar el proceso.
Cómo se fabrican los virus – Los verdaderos procesos del virus
Los virus no infectan células sanas estables. Disuelven células y tejidos muertos y en descomposición, disolviéndolos para que pueda prosperar una nueva actividad celular. Una buena analogía: Las moscas aparecen en la materia muerta pero no son la causa de la materia muerta. Son carroñeras que descomponen la materia muerta. De este modo, los virus y las bacterias actúan exactamente igual en el organismo. Sin carroñeros en la Tierra para limpiar los residuos, el aire de la Tierra se volvería tóxico. Los mismos procesos se llevan a cabo en el cuerpo a un nivel macro microscópico. La ciencia afirma lo contrario de lo que la realidad nos dicta a través de nuestra propia observación de la naturaleza. Esto es imposible porque nuestros cuerpos son microcosmos de la forma en que la naturaleza opera fuera de nuestros cuerpos. Suponer lo contrario va en contra de nuestra naturaleza observable y es una tontería.
Como se ha dicho, cuando las funciones normales de conserjería del cuerpo han disminuido en gran medida y han muerto debido a la toxicidad sistémica, las células ya no pueden mantenerse a sí mismas. Las células se unen como una unidad entera para salvarse y conspiran para limpiarse fabricando construcciones proteínicas solventes (virus) que desensamblan y descomponen las células muertas y moribundas, los desechos celulares, los tejidos y los residuos extraños. Las células fabrican virus en su forma completa celularmente. En este proceso, los virus se fabrican directamente dentro de la célula utilizando proteínas virales preexistentes en la célula y el genoma, y se incrustan/codifican con ARN y/o
En este proceso, los virus se fabrican directamente dentro de la célula utilizando proteínas virales preexistentes en la célula y en el genoma, y son incrustados/codificados con ARN y/o ADN por la célula huésped. La célula expulsa el virus, que a continuación es regulado por los glóbulos blancos mediante esa codificación (anticuerpos), que supervisan los procesos del virus. Esto permite controlar y regular adecuadamente la actividad viral.
Estas dos funciones están unidas como un solo proceso, y no actúan por separado. Una vez que la célula expulsa este virus, la célula resulta parcialmente dañada, pero no destruida. Los virus, que son muchos, consumen y disuelven el tejido muerto, moribundo y extraño, los desechos, las células no sanas y los residuos celulares. Este proceso lleva tiempo dependiendo de la toxicidad implicada. Los efectos de su eliminación son los síntomas que se experimentan en el resfriado o la gripe. Los virus descomponen estas sustancias en partículas diminutas que pueden expulsarse a través de las mucosas, la piel y los intestinos. Una vez finalizado el proceso, el organismo se fortalece, siempre y cuando la persona no siga toxificando más su cuerpo. Si lo hace, siempre se producirán desintoxicaciones extremas.
Obra de arte producida por Jeff Green. Copyright 2020-2023 © Jeff Green, Todos los derechos reservados.
Hechos virales:
- Los virus no pueden penetrar a través de la piel o los ojos. Estos vectores no funcionan porque las membranas mucosas y el sistema inmunitario desechan pequeñas cantidades de proteínas extrañas, como los virus.
- Los virus no pueden entrar a través de las heridas porque sangramos hacia fuera, no hacia dentro.
- Los virus no «existen» fuera de las soluciones de las placas de Petri o de un cuerpo vivo.
- Los virus no pueden funcionar sin una célula huésped que los fabrique y codifique, y los virus no pueden replicarse sin una célula huésped.
- Los virus no «infectan» ni «invaden» células. En primer lugar, no están vivos para hacerlo. Los virus casi nunca disuelven el tejido vivo, salvo en circunstancias específicas como la poliomielitis y las enfermedades degenerativas del sistema nervioso en las que existe toxicidad por metales.
- La función principal de los virus es disolver la materia muerta.
- Las células producen diferentes cepas víricas en función del estado del tejido afectado.
- Existen 320.000 cepas víricas inherentes al cuerpo humano, y cada célula contiene la composición de proteínas víricas para fabricar cada cepa cuando el organismo lo requiere.
- Los virus están codificados con ARN/ADN para descomponer tejidos y residuos específicos muertos y moribundos. Los virus son estructuras proteínicas muy específicas.
- Toser, estornudar y escupir no es un vector para la transmisión de virus. La saliva y las membranas mucosas descomponen cualquier partícula de este tipo. La piel tampoco es un vector porque los virus no pueden atravesar las capas muertas de la piel.
- La única forma de contraer un virus fuera de los medios naturales es mediante inyección directa (vacuna) o transfusiones de sangre de un paciente que tenga un virus. Sin embargo, en estos casos, el organismo sólo lo analiza como un tejido extraño que debe ser eliminado. Como el virus no se originó dentro del huésped corporal, ese organismo no conoce el momento y el lugar en que el virus estará activo ni tiene la clave para descodificarlo (ARN o ADN codificado por la célula) y no puede encontrar el momento de su actividad. Por ello, es analizado como una sustancia extraña que debe ser eliminada. Se fabrican disolventes proteínicos (virus) de distinta potencia para desechar estos residuos si los microbios vivos no pueden eliminarlos.
- Los virus son el resultado de la toxicidad interna causada por el medio ambiente. Los virus son cíclicos en los animales. Los virus se alimentan de los productos de desecho de la sangre y los tejidos. A lo largo del año, con los cambios de estación y de clima/temperatura, el cuerpo vierte cantidades masivas de toxinas en la sangre para su eliminación. Algunas de estas toxinas son tan tóxicas por naturaleza, como el mercurio, el formaldehído y otros subproductos químicos, que los microbios vivos no pueden alimentarse de ellas y eliminarlas sin morir. Las proteínas no vivas son entonces fabricadas por cada célula en el lugar correspondiente del cuerpo donde es necesaria esta limpieza. Esas sustancias tóxicas son desmontadas y descompuestas por los virus para que el organismo pueda eliminarlas, restableciendo la homeostasis.
- La única forma de utilizar virus como armas biológicas es mediante inyección, y punto. Es posible que tales cepas virales artificiales se incluyan en las vacunas regulares existentes, y esto no debe descartarse como una posibilidad, pero como se dijo anteriormente, las cepas virales de fuera del cuerpo no son reconocidas. Sin embargo, las sustancias artificiales que se inyectan pueden diseñarse para provocar reacciones extremas en los seres humanos mediante diversos niveles de esterilización de tejidos y adyuvantes.
- Los virus no pueden cruzar especies, es decir, del animal al hombre. Es imposible que los humanos desarrollen la gripe A animal. Porque los virus no son contagiosos y, B. Porque el ARN/ADN animal no es compatible con el ARN/ADN humano. La única forma en que se puede observar tejido animal en la sangre es a través de la inyección de tejidos animales, que se abren camino hasta la sangre, evitando el tracto digestivo. Sólo entonces aparecerá en el organismo tejido porcino, o de ave, o de cualquier otro animal. Cuando un ser humano consume carne animal, ésta se convierte en tejido humano. Las células humanas no pueden producir células animales o virus. Si desarrollamos virus, son virus humanos. Aunque los virus animales «secuestraran» células humanas, no es posible que las células humanas produzcan virus animales.
Aquí mostraré las importantes diferencias entre lo que ahora se adopta mucho en la ciencia dominante, conocida como la «Teoría de los gérmenes», y la «Teoría del terreno» de Antoine Béchamp:
El coronavirus es un virus respiratorio fabricado por las células de los pulmones y las zonas respiratorias para limpiarse de la toxicidad sistémica.
Este tipo de virus del resfriado se produce y funciona de la siguiente manera:
- Coronavirus MERS-CoV (2019-nCoV) es un tipo de síndrome respiratorio agudo (SARS) con síntomas de leves a parecidos a los de la gripe. El SRAS está causado por la toxicidad ambiental provocada por el hombre.
>Sustancias químicamente tóxicas del aire se respiran en los pulmones y el sistema respiratorio
> Las partículas tóxicas aterrizan en la superficie de los pulmones y los sacos llenos de líquido en los pulmones (alvéolos) donde no pueden ser desalojadas o disueltas por microbios vivos debido a su toxicidad y naturaleza
>Estructuras solventes de proteínas no vivas específicas (virus) son entonces fabricadas por células en el sistema respiratorio para desmontar y descomponer estas sustancias en los pulmones>Suelen producirse síntomas leves similares a la gripe, incluyendo tos y fiebre, lo que inicia el proceso de limpieza y curación. La tos aporta sangre y nutrientes al sistema respiratorio. Los síntomas asociados a su eliminación son los que se producen durante el SRAS.
Esta enfermedad puede aparecer en millones de personas debido a la densidad de población, como en China, que respira ese aire a diario. Esto no significa que sea contagiosa, no lo es.
Los 4 pasos principales para la creación de coronavirus:
- Las sustancias químicamente tóxicas del aire se respiran en los pulmones y el sistema respiratorio.
- Las partículas tóxicas aterrizan en la superficie de los pulmones y en los sacos llenos de líquido de los pulmones (alvéolos), donde no pueden ser desalojadas ni disueltas por los microbios vivos debido a su toxicidad y naturaleza.
- A continuación, las células del sistema respiratorio fabrican estructuras disolventes proteicas no vivas específicas (virus) para desmontar y descomponer estas sustancias en los pulmones.
- Suelen aparecer síntomas leves parecidos a los de la gripe, como tos y fiebre, que inician el proceso de limpieza y curación.
Las siguientes imágenes muestran la evolución de los niveles de contaminación en los meses de Enero – Febrero de 2020, que coincidia con un descenso de la tasa de casos del virus:
Las imágenes de satélite muestran drásticos descensos de la contaminación en el último mes en Wuhan. Se puede ver fácilmente lo mala que ha sido la contaminación en Wuhan y en el resto de China.
Por qué surgen los virus en el organismo (resumen):
Como ya se ha dicho, los procesos de fagocitosis, fúngica, parasitaria y bacteriana, que son todos microbios vivos, se encargan de consumir y eliminar las células muertas, los desechos celulares y los residuos extraños. Pero cuando el tejido es tan tóxico que esos microbios vivos no pueden alimentarse de esas sustancias y eliminarlas sin morir envenenados, las células conspiran para limpiarse fabricando disolventes no vivos específicos conocidos como virus, que descomponen y desensamblan esas sustancias en partículas para expulsarlas al exterior a través de la piel, las mucosas y los intestinos. Los virus salen de la célula dañando sólo una parte de ella, pero sin destruirla. Una vez fuera de la célula, son regulados por los anticuerpos de los glóbulos blancos para disolver tejidos y restos específicos necesarios para restablecer una homeostasis relativa. Los virus no destruyen la célula en la que se replican, sin embargo la ciencia afirma que infectan otras células y SI destruyen otras células indiscriminadamente, lo cual no tiene ninguna prueba ni sentido lógico. Tal teoría es obviamente falsa porque entonces los virus atacarían a todas las células vivas sin causa, matando el cuerpo cada vez, pero esto no ocurre. Los virus sólo disuelven residuos muertos y moribundos en casi todas las circunstancias.
Dado que el metal es difícil de eliminar del cuerpo, es natural que los virus descompongan el tejido vivo para eliminar esos metales, lo que da la ilusión de que el virus está trabajando de alguna manera contra el cuerpo. En realidad, el virus está intentando curar la toxicidad sistémica del cuerpo y revertirla. Los metales se acumulan en el cuerpo a partir de diversas fuentes, una de las cuales son los adyuvantes de las vacunas.
Conclusión:
No hay otra explicación para el mantenimiento del cuerpo humano. Es la única respuesta lógica. La verdad ha sido ocultada por la ciencia durante casi 200 años, aunque fue revelada hace mucho tiempo, en el siglo XIX, por científicos como Antoine Béchamp, quien documentó en sus propios experimentos que los virus son agentes no vivos dependientes del terreno que descomponen la materia de desecho, que provienen del interior, no del exterior. Los virus no son más que proteínas que limpian. Lo mismo ocurre con el cáncer. El cáncer es otra forma que tiene el cuerpo de intentar curarse a sí mismo, encerrando células muertas en un tumor que el cuerpo es incapaz de eliminar adecuadamente para poder disolver y limpiar esas células del cuerpo en un momento posterior. El cuerpo es milagroso y encuentra formas de curarse sin importar las circunstancias. Tiene maneras de cortocircuitar y atajar caminos en tiempos de problemas.
Es triste que la ciencia moderna haya desviado a tantos de su camino en lo que respecta a su propio cuerpo y a cómo funciona, creando miedo y pánico, y cosechando enormes cantidades de dinero para aquellos que están en el poder. Ese miedo hace que desconfiemos de nuestro propio cuerpo, de nuestros vecinos y de la propia naturaleza, haciendo que parezca que somos impotentes ante la enfermedad, que está fuera de nuestro control y que sólo el sistema médico puede salvarnos de nosotros mismos. ¿En qué podrían beneficiarse los poderosos de semejante caos? Explore ese pensamiento. Esta confusión ha llevado al «brote» de coronavirus, y al consiguiente miedo y caos que rodea a este acontecimiento fabricado y exagerado. Este virus está siendo utilizado para instituir leyes y medidas al estilo del estado policial en todo el mundo, y sólo aumentará si la mayoría no despierta a las mentiras que rodean la naturaleza de los virus y las enfermedades.
Referencias:
- La aguja envenenada: Suppressed Facts About Vaccination, 1956, por Eleanor McBean M.D., N.D. (muestra los numerosos peligros de las vacunas, las estadísticas manipuladas a lo largo de la historia, cómo surgió la polio y la naturaleza de los virus y las enfermedades).
- ¿Béchamp o Pasteur? A Lost Chapter in the History of Biology por E. Douglas Hume, 1923
- «La sangre y su tercer elemento» por Antoine Béchamp, 1912
- La inmunización: The Reality Behind the Myth, de Walene James, 1942 (analiza la «Teoría del terreno» de Béchamp sobre bacterias y virus).
- The Dream & Lie of Louis Pasteur, R.B. Pearson, 1942 (publicado por primera vez en 1942 con el título «Pasteur, plagiador, impostor: la teoría de los gérmenes al descubierto». Demuestra que Louis Pasteur plagió y tergiversó el trabajo del profesor Antoine Béchamp. El autor defiende el punto de vista de que las bacterias en el cuerpo son un resultado, no una causa de enfermedad, que las vacunas son perjudiciales o, en el mejor de los casos, ineficaces, y que Pasteur no se dio cuenta de las consecuencias de las vacunas que él y sus seguidores crearon).
- «El microbio no es nada. El terreno lo es todo» – Claude Bernard 1813-1878 (ampliamente considerado como el padre de la fisiología moderna).
- «La causa primaria de la enfermedad está en nosotros, siempre en nosotros» – Profesor Pierre Antoine Bechamp, 1883.
Fuente: www.virusesarenotcontagious.com
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